Por ser víctima constante de atropellos y abusos, la ciudadanía de Ciudad Cardel denunció el hartazgo que sienten hacia los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, adscritos a la Fuerza Civil.
Las faltas en mención, son perpetradas constantemente (día y noche) en contra de pobladores por distintos motivos –según el criterio de los uniformados-.
En redes sociales, ya circulan videos de la detención arbitraria a un usuario, que viajaba en una motocicleta junto a su hijita; mismo que es intervenido por los patrulleros sobre la calle Venustiano Carranza esquina con las Antiguas Vías al Ingenio El Modelo.
Allí se aprecia como lejos de darle las garantías que una detención conlleva, se aprecia como es empujado, intimidado y esposado para llevárselo detenido a los separos del cuartel Aurelio Montfort, pues el argumento del personal policiaco era porque no traía casco protector, mientras tanto; también se aprecia como otros motociclistas (que tampoco portan el equipo de protección), pero no son molestados.
De igual forma se visualiza que la unidad radio patrulla, no cuenta con el numeral completo, es decir; el número oficial ubicado en la batea está faltante de un número además de que los oficiales, portan pasa montañas para no ser identificados.
En su momento el usuario les explica que no viene bajos los efectos del alcohol, que solo había llevado a su hija a cenar; pero los oficiales de la Fuerza Civil lo jalonean para terminar llevándoselo detenido, al momento en que aparece un operador de grúa para llevarse una motoneta pequeña, tipo scooter al corralón.
En Cardel, ciudadanos denuncian hartazgo por acoso y abuso de la Fuerza Civil
La inconformidad de los usuarios radica en que los patrulleros, lejos de vigilar la ciudad y detener a posibles delincuentes, instalan retenes fuera de la ley en diversos puntos de Ciudad Cardel y del resto de las comunidades pertenecientes al municipio de La Antigua, con el objeto de obtener recursos aprovechando su posición ante la sociedad.
Ya sean autos o motocicletas, detienen a los tripulantes y sin que exista falta alguna, los quejosos refirieron que retienen el vehículo o la unidad motorizada, siendo llevados al corralón en una clara usurpación de funciones.
Además, el conductor o conductora al ser detenido, (a pesar de que no ingirió bebidas embriagantes) y para poder dejar los separos preventivos, paga una multa exagerada –de la cual no reciben documento de pago o recibo-, aunado el costo del encierro y arrastre de la grúa.
Dichas actividades se refuerzan los fines de semana y máxime en días de pago, acosando a los clientes de bares y cantinas, restaurantes y sitios públicos.
Por esta razón, en breve se hará una manifestación para pedir que sean retirados de la ciudad, ya que los elementos policiacos lejos de estar pendientes de que no existan robos en los comercios, casa habitación, escuelas o en la vía pública, están más preocupados por cometer abusos contra los pobladores.
Por: Jesús Olivares
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