Según el doctor Octavio Gómez Ramos, quien lidera el Servicio Mareográfico Nacional de la UNAM, el huracán Otis que golpeó a Acapulco la semana pasada registró ráfagas de viento de hasta 330 km/h. Este dato es extremadamente alto y raramente se ha visto en el mundo.
En relación a los máximos vientos sostenidos, se registró una velocidad de 182.28 kilómetros por hora, lo cual representa una cantidad extraordinaria y resulta en la generación de devastación.
Gómez Ramos, destacó la importancia de medir los vientos sostenidos en los análisis de riesgo, ya que son los responsables de la mayor destrucción. Sin embargo, la velocidad de ráfaga, esos picos que se alcanzan, es crucial para los modelos numéricos, que son herramientas fundamentales en la prevención de huracanes.
Con ráfagas de viento de 330 km/h Otis ha sido el huracán más potente que ha impactado en México
De acuerdo con Alejandro Martínez Sidney, Presidente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos en Acapulco, al menos 63 mil negocios de diferentes sectores económicos fueron destruidos por la fuerza del fenómeno meteorológico.
“La pérdida se divide en dos: una parte fue causada por la intensidad del fenómeno meteorológico y la otra, por los actos de rapiña”, detalló.
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