La espiral inflacionaria no se combate sólo con buenas intenciones, falta reactivar la producción interna, el campo y demás ejes de la economía.
Por segunda ocasión el gobierno federal anunció plan emergente para contener el efecto inflacionario; el primer intento fracasó en la práctica, los precios de alimentos básicos siguen a la alza.
La solución o cuando menos atenuar el impacto no depende de voluntad de los políticos, se requiere el concurso oficial y productores decididos a reactivar el campo y demás espacios de ocupación sustentable.
Esta declaración del licenciado Jesús Muñoz de Cote Sampieri, expresidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Veracruz-Boca del Río, es producto de la experiencia diaria vivida en cadena de tiendas de autoservicio de su propiedad, la cual revela movimientos frecuentes en etiquetas de todas las listas actualizadas por proveedores tanto en artículos nacionales como de importación.
Mala señal con importaciones
El empresario veracruzano coincide con quienes consideran medida inadecuada el hecho de abrir fronteras de par en par a todo aquello que representa déficit, sobre todo en el rubro de la carne, porque implica riesgos fito-zoosanitarios, plagas que con esfuerzo de muchos años se tuvieron bajo control.
Hablar del ingreso de maíz entre otros granos sin cubrir los “filtros” que garanticen inocuidad del contenido de importaciones, en opinión del representante del sector empresarial, significa renunciar al compromiso de la autosuficiencia alimentaria que lleva implícito oportunidades de los campesinos en el aprovechamiento de sus parcelas ahora ociosas por falta de apoyos indispensables para conservar ambiente amigable en el medio rural.
Arraigar a jóvenes en sus comunidades, alejarlos de tentaciones que suelen tenderles organizaciones criminales.
Inventarios para fin de año
Nadie en sus 5 sentidos desearía que le vaya mal al gobierno en el caso de la mitigación a dinámica inflacionaria; pero luego de la primera experiencia, en esta ocasión le dan el beneficio de la duda.
Comerciantes organizados acatan disposiciones y cumplen lo mejor que pueden.
En tanto, desde ahora atienden el inventario programado para operaciones de fin de año.
Lo fundamental radica en garantizar suficiente abasto, no dejar nada a la improvisación, causa de muchos fracasos en cualquier frente sea oficial o privado.
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