Los maestros deben tener pasión y amor por lo que están haciendo, ya que somos nosotros los pilares fundamentales de la educación y de la formación de las personas y ello es un gran compromiso, pues se trata de la sociedad que le vamos a dejar a este mundo, afirmó la maestra Adelina del Carmen Solís Belmonte, directora del jardín de niños “Henri Wallon” del fraccionamiento Hacienda Sotavento de la ciudad de Veracruz.
Pasión y amor por lo que hacen, la clave
“Creo que la verdadera labor del maestro es el amor al arte, o sea, si tú sientes pasión por aquello que haces, yo creo que los vas a hacer siempre bien, siempre te vas a enfocar, a dedicarte, a poner todo de ti, a buscarle solución a todo y no decir no se puede”.
En entrevista para El Decano de la Prensa Nacional, explicó que cuenta con 30 años de servicio en el nivel preescolar y es egresada de la normal de Tlacotalpan y desde que egresó supo que tendría que entregar lo mejor de sí, pues en sus manos están las raíces del saber de sus educandos, quienes serán parte de las futuras generaciones de este país.
“Mi satisfacción siempre se ha reflejado en la niñez veracruzana”
Añadió que hoy en día es muy satisfactorio que las escuelas estén incluyendo en sus grupos a niños especiales, quienes forman parte integral de las comunidades y que por mucho tiempo eran limitados a planteles para personas especiales y ahora, se integran a los grupos brindando enseñanza y valores a niños y a maestros.
“Mi satisfacción siempre se ha reflejado en la niñez veracruzana, en la atención de nuestros niños que son de dos años y medio a cinco o seis años cumplidos (…) Lo que más me ha gustado de ello es atender a alguno de esos pequeños que presentan alguna discapacidad”.
La docente reconoció que el sistema educativo ha cambiado y aunque el profesor tiene menos facultades para reprender a un menor cuando presenta conductas inadecuadas, sus habilidades en la enseñanza le permiten nuevas alternativas para educar, pues hoy en día se trata de establecer un trabajo coordinado con los padres de familia para lograr un bienestar para las y los estudiantes, de tal forma que, con cariño y disciplina de obtengan las metas propuestas.
Recordó que uno de los retos más nobles es la atención a menores con discapacidad, para lo cual, ha tenido el respaldo de la Unidad de apoyo a la Educación Regular (USAER), la cual, los ha dotado de herramientas que les permiten dar una atención integral a pequeños con estas características.
La maestra Adelina aseguró que la pandemia por Covid-19 representó un gran desafío, al cual tuvieron que hacerle frente con la mejor actitud, pues no podían incumplir con este noble deber de preparar a sus niños y aunque su cargo es directivo, ella asume su compromiso con su equipo de trabajo, pues la educación de sus educandos es primero.
Los maestros, pilares fundamentales de la educación
“Todos somos un equipo, ahí nadie, es más, nadie es menos, todos somos un equipo y tenemos una responsabilidad y el que yo tenga un cargo, no significa que no puedas involucrarte en todas las situaciones que los compañeros vienen sacando adelante”.
Para concluir, la directora de preescolar felicitó a sus homólogos en el día del maestro y los exhortó a seguir trabajando por el bien de la educación y de la niñez veracruzana y del país, pues no hay obstáculo suficiente cuando de enseñar se trata.
“¡Que nada nos apachurre!”
“Mi mensaje para todos los maestros sería de que nunca nos apachurre nada, siempre nos conduzcamos con la frente en alto, buscando la solución a lo que se nos presenta, que no hay nada, ningún obstáculo a pesar de vivir esta pandemia”, concluyó.
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