¡Excelente y motivacional! Así podemos definir la nueva película de Netflix “Garra” que se encuentra producida y protagonizada por Adam Sandler quien brinda una de sus mejores actuaciones, y es que su fuerza y entrega nos lleva por una historia en la que los sueños se pueden hacer realidad si se trabaja con el corazón, ejemplo a seguir de Juancho Hernangómez, jugador de baloncesto español que pertenece en la vida real a la NBA, ambos mostrando una química inolvidable con sus personajes en este camino por alcanzar metas y limar asperezas personales.
Stanley Sugerman pasa la mayor parte de sus días en hoteles de lujo lejos de su familia, es decir su esposa e hija. Viaja por todo el mundo en busca de nuevos talentos en el baloncesto que pueda traer a Filadelfia. Pero ahora está cansado de este hábito. Cuando su jefe, Rex Merrick, le ofreció ser el entrenador asistente del equipo, aceptó felizmente. Sin embargo, la repentina muerte de Rex lo vuelve a encarrilar. El nuevo jefe, el hijo del dueño fallecido, quiere que Stan regrese como explorador, pero cuando expresa su deseo de ser AC, recibe un regalo. Si va a la prueba y regresa con el mejor jugador del equipo, puede esperar trabajar como entrenador, y ahí conoce a un diamante que le permitirá aprender y lograr lo que jamás imaginó.
Esta cinta resulta satisfactoria desde los primeros minutos gracias al buen ritmo que lleva al presentarnos a un hombre, que pese a que su alrededor lo quiere mostrar como si estuviese en etapa de decadencia y que no vale la pena, su instinto y deseo de hacer las cosas bien lo llevan a conocer a un joven por azares del destino, a quien ayuda y sirve de guía para motivarlo y hacerle entender que tiene un futuro muy prometedor, aprendiendo a moderar sus impulsos violentos.
Con la buena interpretación de sus protagonistas, el buen apoyo que brindan los personajes secundarios, desde la familia hasta los directivos, esta película deportiva llena de adversidades y triunfos, recae en contar situaciones de la vida real aún cuando se trata de una historia de ficción y es que sin duda a Sandler le quedan muy bien los papeles dramáticos a los que nos ha estado acostumbrando de unos años para acá, porque en la vida real y aun cuando siempre era objeto de críticas, es un actor que vale la pena y se le agradece el que forme parte de estas historias que han sido mil veces contadas, pero que da gusto disfrutarlas por su toque de emotividad, su comedia bien colocada y esa relación maestro alumno que siempre es efectiva sin importar lo predecible que pueda ser su final.
